El paso del tiempo

miércoles, 28 de septiembre de 2011

Primeras vivencias o...recuerdos

Atardecer en Valdelagrana

Hablando de recuerdos... A veces hago un gran esfuerzo por poner en pie mis primeras vivencias pero sólo consigo algunos retazos. Mi madre aparece en la mayoría. Uno de los más nítidos es un patio interior, blanco y una mecedora. A mi alrededor macetas de helechos, geranios, gitanillas. El suelo de baldosas amarillas. Al fondo una puerta sin puerta, con una cortinilla. Arriba, en la pared compartida con mi vecina Catalina, un presentimiento de aparición. Lloro sin consuelo ni motivo, un llanto perreoso de niña infeliz, quizás asustada... en una continua búsqueda.

Unos brazos me acunan y un canturreo me hace entrar en el sueño, que no es tal porque mis sentidos están despiertos, atentos a amenazas. Los caniculares, la noche o la Mano Negra vendrá y te llevará... "Vete Mano Negra, que mi niña es buena". Sin embargo, el desconsuelo sigue. No sé bien por qué, todavía a veces lo siento más de 40 años después. Nada me ha librado de él; a veces está más distraído y otras más lleno, pero siempre está. Será una característica de mi alma.

Hoy la palabra será retazos, es de lo que está hecha la vida. Cómo si no recordarla.

martes, 27 de septiembre de 2011

En poco tiempo

El cansancio me puede esta noche. La lucha diaria me deja extenuada y, a pesar, de amar un portal como este, no llego a sus páginas en blanco. Un mes de trabajo intenso y pararé un poco, me tomaré un tiempo para vivir, no para sobrevivir. 


Siempre esta hora es la mejor para recordar. El problema es que, a veces, sólo a veces, los recuerdos son un viaje que en la mente quieres seguir por otro camino que no es el escogido. Qué hice bien, qué hice mal? Qué hubiera pasado si... Cómo estaría ahora con... Entonces la imaginación te lleva lejos. A otro país en el que sólo estuve en pensamiento, en deseos, y siento añoranza. No es comprensible porque es difícil sentir añoranza de lo que no se ha vivido, solo imaginado. Pero así es. 

Quizás todo suceda porque en el fondo siempre sientes un descontento, una insatisfacción con lo que te tocó vivir. Pero todo fue consecuencia de una elección. Lo único que no se elige es la familia a la que perteneces, no la que tu creas. Tampoco se elige siempre lo que trae el destino. Por ejemplo, la niña de la imagen ha sido una elección, una de las acertadas.